Viernes, 25 Abril 2025

Comunicar turismo no es solo mostrar un lugar, es despertar una emoción.

Hay quienes recorren el mundo en silencio. Y hay quienes lo caminan con palabras.

 

Por Jacobo Malowany para CIPETUR


Tú, que ya empezaste a compartir tus viajes, que sientes algo cuando describes un rincón escondido, un sabor nuevo o un paisaje que nadie más miró igual… ¿te diste cuenta de que ahí hay una oportunidad?

Tu forma de contar puede ser el inicio del viaje de otra persona.
Y eso, aunque parezca sencillo, es poderoso.

Comunicar turismo no es solo mostrar un lugar. Es despertar una emoción.

No importa si escribes desde un pueblo de 500 habitantes o desde la ciudad más visitada del mundo. Lo que importa es que puedas responderte:
¿Qué hace único a lo que estás viendo? ¿Qué sentiste tú? ¿Qué podría sentir alguien más si estuviera ahí?

Contar no es lo mismo que emocionar.
Y eso se puede aprender.

¿Quieres algunas ideas para empezar a practicar?

Escuchar para crear algo que importe

Lee los comentarios que te dejan. Escucha lo que tu comunidad te pregunta. Ahí está la guía para tu próximo contenido.
Ejemplo: alguien busca “un lugar tranquilo para reconectar”. ¿Y si en lugar de darle solo un nombre, le compartes cómo ese lugar te ayudó a reencontrarte contigo?

Escribir desde lo que te pasa, no desde lo que se espera

¿Alguna vez un amanecer te hizo llorar? ¿Una comida te llevó a un recuerdo de infancia? Eso es lo que genera conexión.
Los datos se encuentran en cualquier lado. Las emociones solo se encuentran en quien las vivió. Y tú eres esa persona.

Preguntar como quien quiere descubrir, no solo informar

A un guía turístico no le preguntes "¿Qué lugares recomienda?", sino “¿Cuál es el rincón que visitas cuando quieres estar en silencio?”.
La diferencia está en lo que sucede después: historias más personales, más profundas, más tuyas.

Elegir palabras que hagan viajar sin necesidad de moverse

No digas "una vista increíble". Di "la brisa olía a sal y a eucalipto, y el sol pintaba de dorado los techos de las casas bajas".
Transporta con las palabras. Haz que quien te lea sienta que está ahí contigo.

Celebrar la cultura sin maquillarla

Si visitas un pueblo y te reciben con un saludo en lengua originaria, inclúyelo. No hace falta explicarlo todo. Basta con integrarlo con respeto y contexto.
El turismo auténtico no necesita traducción. Solo necesita sensibilidad.

Y ahora, ¿te animas a ser más que un viajero?

Comienza a crear relatos que inviten, no que impongan.
Historias que enciendan el deseo de descubrir, de probar, de vivir.
Porque en un mundo lleno de filtros, tu voz puede ser ese hilo que conecta personas con lugares reales.

Y si no sabes por dónde empezar, estoy para ayudarte.
Puedo acompañarte a encontrar tu estilo, tu tono, tu camino.
Porque tu voz tiene un lugar en el turismo.
Solo falta que empieces a usarla.

¿Te pasa algo cuando cuentas tus viajes? ¿Te cuesta más comenzar o mantener la constancia?
️ Cuéntamelo en los comentarios. La conversación empieza contigo.

No es solo un hobby: tu forma de contar puede convertirse en tu profesión

Publicas fotos increíbles.
Cuentas anécdotas con emoción, como si ese momento aún estuviera latiendo dentro de ti.
Tus amigos te lo dicen seguido: “¡Deberías trabajar en esto!”
Y, aunque sonríes, algo dentro de ti también lo piensa.

? No es un sueño lejano.
Es una oportunidad real.

Ser comunicador turístico no es lo mismo que ser influencer.
No se trata solo de seguidores ni de mostrar lugares bonitos.
Es saber narrar destinos con propósito, crear comunidad, inspirar desde lo humano y generar valor real.
Con tu estilo. Con tu voz.

¿Por dónde empezar?

? Escucha lo que tu audiencia busca.
️ Comparte vivencias, no solo datos.
️ Cuenta desde lo que sentiste, no desde lo que se espera.
? Habla con respeto de cada cultura, como invitado y no como espectador.
? Escribe con intención. No para que te den “me gusta”, sino para que quieran seguir leyendo.

Porque tus historias pueden ser más que recuerdos.
Pueden ser el mapa emocional de otros viajeros.
Quienes te lean podrían encontrar en tus palabras el valor para animarse, el detalle que necesitaban, la emoción que no sabían poner en palabras.

Y sí: también puedes colaborar con marcas, participar en campañas, escribir para medios, formar parte de proyectos de turismo sostenible… o emprender tu propio camino.

? Empieza hoy a crear viajes para otros.
Y si necesitas acompañamiento, ideas o ayuda para transformar tu contenido en comunicación con impacto, estoy aquí.

Este puede ser el primer paso hacia una nueva forma de comunicar el mundo.
¿Te animas?