Éxodo Jujeño. Diario de Viaje - Primer día
La Secretaría de Turismo y Cultura de Jujuy, con el Ministerio de Turismo de la Nación, invitó a cuatro periodistas del Círculo de Periodistas de Turismo del Uruguay (CIPETUR) al “fam press” Éxodo Jujeño, en razón de que el 23 de agosto se conmemoró el 199 aniversario de la gesta de 1812, antesala del Bicentenario que se celebrará el próximo año.
por María Shaw
La idea fue que un grupo de periodistas de turismo, tanto de Argentina como de Uruguay, pudieran conocer y compartir las actividades previstas para esta fecha, tan cara en la Historia de Jujuy y de todos los argentinos.
Por ello, gracias al apoyo de Aerolíneas Argentinas, Ricardo Garzón, Edgardo Martínez Zimarioff, Jeannette Baccino y María Shaw, partimos el domingo 21 en el Boeing 767 700 hacia el Aeroparque Jorge Newbery, desde donde conectamos con el vuelo a Jujuy, en un avión Embraer 190 de Austral, ambos con horarios cumplidos a la perfección, y amable servicio de abordo.
Edgardo Marínez Zimarioff, Jeanette Baccino, María Shaw y Ricarado Garzón al arribo a Aeroparque en vuelo de Aerolíneas Argentinas
A la llegada al aeropuerto Dr. Horacio Guzmán, nos encontramos con los colegas argentinos de los medios: Viajes & Paseos, HostNews, Trotamundos, Lonely Planet, y El Periplo. Y con nuestro guía Gustavo Barnichea y el chofer Luis. Salimos hacia San Salvador de Jujuy, a 27 kilómetros, rodeados de lapachos en flor de un seductor color rosa lila.
La norteña provincia de Jujuy, que limita con Bolivia, Chile y Salta, cuenta con 600.000 habitantes, y alrededor de la mitad viven en la capital San Salvador de Jujuy. Esta ciudad está a 1.259 metros sobre el nivel del mar, y emplazada en un valle atravesado por los ríos Grande y Xibi-Xibi, ó Chico, a pesar de que ninguno mostraba su caudal, que se hace torrentoso en épocas de deshielo.
Nos alojamos en el Ohasis Jujuy Hotel & Spa, un cuatro estrellas ubicado en el centro, a pocas cuadras del casco histórico y de la zona comercial. Cuenta con 57 habitaciones y suites, salones de convenciones, business center, lobby bar, restaurante, spa, gimnasio, piscina, sala de juegos, cocheras, para comodidad de los huéspedes, que llegan a la capital por negocios ó por turismo.
Por la tarde realizamos un paseo por la capital poéticamente denominada “Tacita de Plata”, ciudad con pasado indígena, memoria realista y orgullo nacional, fundada en 1593.
Plaza Belgrano. Monumento al Gra.l Manuel Belgrano
El eje del casco histórico es la Plaza Belgrano, antiguamente la plaza de armas, de lindo diseño, muy arbolada, otra vez los jacarandá en flor… y en el lugar de honor, se encuentra la estatua ecuestre del Gral. Manuel Belgrano, héroe destacado de la independencia, hombre de fe, al que el pueblo supo seguir con amor. A su espalda, destaca una hermosa fuente y se observa la Casa de Gobierno.
Fuente y Casa de Gobierno
Alrededor de la plaza se despliegan numerosos edificios históricos, como el antiguo Cabildo, hoy museo policial, de paredes encaladas, con una recova, por el que uno transita pensando en estar en tiempos pretéritos. Al ser domingo, víspera de un feriado que se extendía lunes y martes, había un clima festivo.
Recova del antiguo Cabildo y parte de la Plaza Belgrano
Una de las postales de esta ciudad es la Iglesia Catedral Basílica Menor, edificada sobre las ruinas de una primitiva capilla de 1593, y construida entre 1761 y 1765. De nave angosta, para lo que suelen ser las catedrales del mundo, impacta por su belleza exterior e interior. Impactan el altar mayor, el púlpito barroco en madera de ñandubay laminado en oro realizado por aborígenes, los confesionarios, las telas pintadas de su cielorraso. A su lado, el patio del obispado, con hermosa columnata. Y por sobre todo, resalta la torre del campanario, estilizada, de una gran belleza.
Catedral Basílica
Jujeños en la Plaza delante de la Catedral. Día festivo
En lugar destacado se erige la Casa de Gobierno, rodeado de hermosos jardines, con esculturas de mucho carácter de Lola Mora de 1906: la Paz, la Justicia, la Libertad y el Progreso.
El palacio, de inspiración francesa, fue construido por artesanos venidos de Europa, y por ebanistas locales. Portones de hierro repujado, escalinatas de mármol y farolas impactantes, para acceder a la planta donde se encuentra lo que todos queremos ver y honrar: la bandera de Belgrano, ubicada en un salón de bellísima factura. La enseña patria fue donada por el Gral. Manuel Belgrano al pueblo de Jujuy, en reconocimiento a sus sacrificios durante el memorable Éxodo de 1812 en las guerras de la Independencia. La bandera de raso lleva el escudo que fuera aprobado por la Asamblea Constituyente de 1813. Desde 1927 está en este salón especialmente dedicado a su custodia y homenaje.
Salón de la Bandera
Salimos hacia el norte de la capital, transitando el puente General San Martín, sobre el río Grande, para llegar a Altos de la Viña, donde se puede apreciar una espectacular vista de la ciudad, con los cerros nevados hacia el oeste. Allí se encuentra un hotel tradicional, recientemente refaccionado con originalidad y buen gusto.
Vista de Altos de la Viña*
Por la noche, nos recibió el Secretario de Turismo de Jujuy, Lic. Juan José Martearena, junto al encargado de Comunicaciones y RRPP de esa repartición, Rubén Monerris, para compartir una cena, regada por un buen vino jujeño.
María Shaw entregando el Libro Uruguay Visión al Secretario de Turismo de Jujuy, Lic. Juan José Martearena
Patricia Magariños, periodista de Hostnews; Lic. Juan J. Martearena, Secretario de Turismo de la Provincia de Jujuy;
María Shaw, Secretaria General del CIPETUR y periodista de Radio Carve; Edgardo Martínez Zimarioff, periodista de varios medios de Uruguay; Ricardo Garzón, Director del Diario Enfoques.
En próximas notas, iremos relatando el paseo por la impactante Quebrada de Humahuaca, y otros lugares de esta hermosa provincia del norte argentino.
*imagen: skyscrapercity.com
L/D
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