Viernes, 22 Mayo 2015

Museos al servicio de la sociedad

Así tituló su exposición el Lic. Carlos Fernández Balboa, argentino e intérprete del patrimonio y museólogo. Fue invitado a Uruguay en el marco de los festejos del Día Internacional de los Museos, 18 de mayo y el MINTUR lo convidó a brindar una charla que resultó, interesante, además de oportuna.

por Ma. Elisa Fernández Delgado

MONTEVIDEO + MUSEOS, 2015

El ICOM (sigla en inglés) es el Consejo Internacional de Museos y es una organización relacionada con la UNESCO. Es también, quien representa a los museos y a sus profesionales.
Cada año, busca resaltar un aspecto de la relación del Museo con la sociedad y con el medio ambiente y esta es la 3ª. Edición que se celebra en Uruguay de  “MONTEVIDEO + MUSEOS”  que organiza el Conglomerado de Turismo capitalino, en conjunto con la Intendencia de Montevideo y la Cartera de Turismo.

Este año, se propuso la consigna “Museos para una sociedad sostenible” porque se busca fomentar una mayor concienciación sobre las repercusiones actuales que produce la acción del hombre en el Planeta Tierra, además de la necesidad de cambiar el modelo económico y social. El programa de eventos comenzó en el Foyer del Teatro Solís, el día 12 de mayo, y culmina el próximo 26 de cte.

MUSEOS AL SERVICIO DE LA SOCIEDAD

El panelista consultó a los presentes si sabíamos ¿cuánto público visita el Museo de El Prado? Y su respuesta no se hizo esperar: sólo el 3% de  personas visitaban este importante museo español. Por tanto, los madrileños sufrían del denominado “Efecto de Patrimonio de cercanía”. Este problema se da en todas partes del mundo dijo, porque las personas que están próximas (su residencia, trabajo,…) cuentan con todo el tiempo para verlo y cuando gusten de usarlo lo hacen, justamente a consecuencia de esta proximidad. Entonces ¿cuál es el sentido de tener un museo abierto en estas condiciones con los vecinos?  Hay que agregar que también se presta para que lo visiten los turistas, por tanto, habrá que trabajar para que unos y otros lo visiten y  se logra, a su vez, trabajando sobre temas que tengan que ver con el lugar para dar sentido de existencia.

Lic. Carlos Fernández Balboa junto a su hija

El expositor planteó que en el caso de su país, los argentinos, no tienen arraigado el sentido de pertenencia, y mencionó el texto de Galeano (Memorias del Viento) donde se menciona que  “los rioplatenses…venimos de los barcos”. A pesar que las comunidades viven en el mismo espacio (común), hay cosas que los excede - son los valores intangibles - como el mate, el asado, el fútbol, etc.

Por definición un museo es una “Institución permanente, sin fines de lucro, al servicio de la sociedad y su desarrollo que preserva los bienes materiales del hombre y su entorno. Los adquiere, conserva, investiga y comunica con el objetivo de educación, disfrute y deleite.”

La propia definición de museo implica el concepto de misión, por que cuando un extranjero visita cualquier museo del mundo, él puede llegar a conocer objetos importantes de esa comunidad sin saber su idioma (y por tanto, se justifica que este objeto esté en el museo); pero agregó “también un museo es un espacio aburrido”. Por definición, se observa que un museo además es una “institución permanente, sin fines de lucro, está al servicio de la sociedad y preserva los bienes materiales del hombre y de su entorno. Es decir, “los adquiere, los conserva, investiga sobre ellos y comunica con el objetivo de educar, disfrutar y deleitar”.

Por ejemplo, en Argentina tenemos el museo de la Lengua y la Palabra, lo que se busca es compilar libros y documentos referenciales de ambos; pero la lengua es un bien intangible tanto como la palabra, algo similar pasa con el Tango que debemos preservar, pero es otro bien intangible. Ambos bienes intangibles deberán apoyarse en algo tangible como forma de integrarse mutuamente y preservar este tipo de bienes identitarios.

En museología, se puede hablar de diferentes tipos de museos:

MUSEOLOGÍA NORTEAMERICANA

¿A qué tipo de museología apuntan los norteamericanos? consultó Fernández, en realidad lo que existe es una museología diferenciada sobre los públicos a los que se dirige y por esto es que se puede hablar y reconocerlo. Por ejemplo, este tipo de museología cuenta con cuatro manzanas, algo impensable en nuestra región, de las cuales, hay una media manzana dedicada exclusivamente a la aeronáutica. El objeto en este ámbito se encuentra apoyado en un soporte de alta tecnología. Obviamente, esto se logra porque los museos en Estados Unidos son totalmente privados, cuentan con empresas que los apoyan, millonarios que donan mucho dinero para su gestión, etc.

Se podría decir que es la tecnología al servicio del patrimonio. De todas maneras, les pregunto a Uds. ¿Han visto la película “Una noche en el Museo (2)”?  Aquí se plantea claramente la divergencia que hay en cuanto exhibir al objeto en sí mismo o suplantarlo (guardarlo), ya que cuentan con la tecnología que lo recrea en forma digital. La película refleja muy bien la lucha de ideas que hay al respecto.

MUSEOLOGÍA EUROPEA

La diferenciación, en este caso, está en la posesión del objeto mismo, está ahí presente y lo está de manera abundante. En Europa realmente los museos tienen su público, hasta se organizan en determinadas fechas del año, concursos entre museos. Por lo tanto,  en el caso europeo lo que más importa es el objeto en sí mismo por ser un atractivo mundial.

El tema de poder ver en persona ese objeto determinado,  hace que las personas gasten mucho dinero  para ir a verlo, por ejemplo es una visita casi obligada ir al Museo de El Louvre en París sólo para ver a La Gioconda, y el número de visitantes diarios también es increíble, recalcó.

De todas maneras yo agregaría, que el volumen diario de visitantes durante las horas que está abierto el museo es en realidad lo que no permite desde hace tiempo ver el objeto. En el caso específico del cuadro de La Gioconda se ha convertido, a mi modo de ver, en un absurdo. El no poder acercarse al objeto que no se favorece tampoco por su tamaño, hace que los múltiples visitantes utilicen herramientas intermediarias para poder verlo/captarlo de otra manera.

Otras veces sólo se puede ver al todo a través de ver sólo una parte del objeto, y/o desde lejos observarlo no detenidamente porque resulta imposible. El uso y práctica ya muy extendida de registrar al objeto para verlo lejos del museo en nuestra casa resulta tema de análisis(?) porque las fotografías, las selfies, las cámaras y los celulares han invadido el espacio y contexto del objeto, a falta de una delimitación razonable, para que las personas circulen, a la par que también puedan observar el objeto a través del ojo humano, no a través de la lente.

El argumento principal, más allá del gasto de trasladarse hasta el objeto, es ver un objeto de atracción mundial. La foto que trajo el expositor lo demuestra claramente, se ve el objeto a través de cabezas, nucas, palos y luces ajenas, esta foto es prácticamente igual  a otras fotos que uno sacó porque el hecho se reitera.

MUSEOLOGÍA LATINOAMERICANA

La diferenciación en el caso de Latinoamérica está en los elementos que son locales. Lo que se ofrece es la historia del objeto. García Canclini, académico y autor de varios libros, estudió  este proceso en la década del 60, y se enfocó en el relato. Es importante el valor que tiene en la resignificación del objeto el relato a partir de lo que la gente sabe y cuenta. Esto se toma como valedero, más allá de lo que expresen al respecto los especialistas. Es decir, el museo puede contar otro relato a partir del relato de las personas de su contexto.

Hay varios ejemplos que se pueden dar sobre el valor del relato; si nos remitimos nuevamente al cine, la película “El secreto de tus ojos” tiene mucho que ver con lo que somos. Es decir, si uno viene a Uruguay, voy a tratar de ir a los museos más representativos y estos por lo general coinciden en que son los más visitados. El Torres García, el Figari representan los que los uruguayos son, y la gente venimos a buscar eso, la identidad, lo identitario, porque carecemos de objetos universales. También debemos decir que nuestros museos tienen otros problemas, cuando no están en reparación, les falta personal, o se cierran por varios motivos y nos encontramos con un cartel que dice “Disculpe…” y estos son temas a solucionar porque no se trata sólo de crear un museo, sino de gestionarlo en el tiempo justo para que se sostenga.

RECOMENDACIONES

*La teoría sugiere que cuando una persona visita un museo, su público tiene que estar cómodo, para vincularse con el objeto y la exhibición. Muchas veces en los museos no se respeta la capacidad de carga, y las personas son demasiadas para el espacio que dispone.

*Hay que conocer los códigos de comunicación que tiene un museo, porque los objetos no hablan por sí mismos. El objeto es mudo, no transmite nada, porque no está contextualizado.

*La exposición como otras formas de comunicación (cine, escritura, etc.) tiene sus técnicas a conocer. El relato, el guión y el mensaje es más importante que los objetos. Estos son un elemento fundamental que no debe estar solo.

*Cuando se investiga sobre un objeto, sólo se mostrará un mínimo porcentaje de todo lo investigado. Ya lo dijo Umberto Eco (escritor italiano) el porqué no es conveniente exhibir varios objetos iguales “un signo es cualquier cosa que puede extenderse  y estar en lugar de otro”. Por tano, pierde sentido exhibir varios uniformes de tenientes como ocurre en el museo de la Fortaleza del Cerro, alcanza con colocar uno para comprender de qué trata. Esto se ha realizado muy bien en el Museo del Carnaval donde Ravelino con cierta lógica seleccionó algunos vestuarios, porque además es imposible ver y exhibirlo todo.

*”Fuelles ambientales” son los espacios de descanso que debe haber en todo museo. Es como el texto en un libro que respeta los espacios blancos, esto permite que se lea de mejor forma, de lo contrario es tedioso el material, en una exhibición ocurre ídem.

*El abarrotamiento de objetos, la falta de espacio, la mala iluminación, la ausencia de mensaje y mucho más generan “Fatiga de Museo”. Esto se traduce que no importa nada más sólo se requiere de un espacio para descansar, es como que todo termina siendo NADA.

*Un museo es necesario crearlo cuando además de objetos a exhibir, hay trabajo de investigación, ponencias, etc., si esto no ocurre es mejor formar un Centro de Interpretación donde sólo exhibir objetos dos días a la semana.

*La luz es una herramienta de comunicación. Su uso condiciona el estado de ánimo del visitante y la conservación del objeto. Son de cuidado los textiles, artículos frágiles, etc.

*Los textos (breves) dentro de los museos deben ser acordes a las necesidades del público. El uso del humor y las preguntas colabora en la comprensión de los textos.

*Muchas veces el museo propone actividades más vinculadas al Marketing que al turismo cultural (La Noche de los Museos hay que trabajarla bien, cuando ingresan las personas mínimo hay que recoger su e mail para contactarlos; incorporar bicicletas al circuito hay que pensarlo…)

*La ruta del vino incluye espacios musealizados y de exposición también. Deberían incorporar actividades vinculadas con espacios del vino, es decir, museos y bodegas.

*Las estrategias de Comunicación y de Marketing deben también generar sentido de pertenencia y de apropiación del objeto, como bien se hace en el Espacio Cultural “AL PIE DE LA MURALLA” se le otorga a los niños un certificado que los identifica con el lugar que dice “¡Yo toqué la Muralla de Montevideo Colonial!”. Aquí hay una apropiación de la Muralla, se genera un sentido de existencia cuando la gente la toca como algo propio.

CONCLUSIONES

El museo es un espacio de educación no formal en “tiempo libre” de una persona, y en estos casos las personas no tiene intencionalidad, esto significa que hay que convencerlos de estar en el museo y no en las otras opciones que compiten con él, porque la persona no va a aprender como en una clase, pues debe estar parado leyendo, entonces hay que estimularlo a que se le informe con textos de 60 palabras, más no está dispuesta a leer.

Horacio Arredondo, fue para Uruguay la base del patrimonio nacional, más allá que integró la Comisión Nacional de Turismo, fue presidente del Instituto de Geografía,  es decir, un referente nacional que pocos conocen y hay que reivindicar su trabajo para que la gente tenga idea de lo que hizo, sobre todo, es importante para los uruguayos se trata de devolverles parte del pasado. Hay que buscar la participación, tanto intelectual como física, hay que colaborar con el éxito de una exhibición. Ser intérpretes, se puede traducir como el intermediario, el que genera sentido de pertenencia con cierta intencionalidad. El intérprete, conoce un lenguaje que en el caso del museo es el del patrimonio, lo internaliza y luego lo traduce. Es como que la misma información la trabaja de manera distinta para crear un efecto, en otros. Todo lo mencionado tiene que ver con la participación y hay que buscar los mecanismos para conseguirla.

En el caso del gaucho, es para Buenos Aires un recurso turístico que se trabaja junto a la platería, el trabajo en cuero, etc. El museo gauchesco Ricardo Guiraldes de San Antonio de Areco, la gente iba al museo a hablar sobre temas referentes del campo, el gaucho, el alambrado, entre otros. En el Complejo museográfico Enrique Udaondo, Sala Guiraldes están embalsamados los caballos “Gato y Mancha”… es decir, uno hace una ruta de diferentes cosas para conocer y re-conocer en este caso al gaucho, y esto trae aparejado el turismo, la gastronomía, la platería, también acompañan al tema del gaucho.

Museo del vino

La gente y la propia  comunidad es la que debe tener internalizado el  recurso, ya que da  oportunidades varias a muchos. Un buen ejemplo es el MEF en Trelew (Chubut, Argentina),  12 años atrás era una típica ciudad patagónica; hoy cuenta con un museo Paleontológico.

Todo comenzó con un relevamiento de los animales encontrados en la región y luego su posterior exhibición. Hoy, los visitantes llegan al museo y luego viajan 80 km hasta puerto Madryn para ver las ballenas. Esto tiene que ver con los materiales  que aporta la gente y es un logro. También, uno puede ir al museo y participar del laboratorio, pues in situ trabajan los técnicos ahí. Este museo ha hecho que la estructura turística de la ciudad cambie.
Hay más ejemplos en Argentina, los museos en Tierra del  Fuego son siete en la isla, y se complementan con una Galería Temática en Ushuaia; en San Antonio de Areco, son nueve los museos y son tantos y existen todos porque es la comunidad la que tiene la necesidad de contar de contar su historia, y esto a su vez, se convierte en un recurso turístico.

También hay museos al aire libre, donde el paisaje patrimonial demarca el territorio, permite trabajar más con patrimonios intangibles y además, con la gente. Pongan en Google Shincal de Quimivil, es un centro del mundo incaico en Argentina; fíjense que es Kancha (espacio para viviendas y encuentros) ambos son espacios arqueológicos  abiertos a la comunidad pero con un plan de manejo con el que se administrar el sitio, porque la gestión es clave. Hay que tener cuidado, porque la realidad no está parcializada, sino por el contrario integrada, y esto requiere también de un plan integrado que sirva a la gente de diferentes maneras.

Tres son los tipos de mensajes a transmitir: (1) Mensaje Universal, en este tipo hay diversión, amor… cuando un extranjero visita a este museo siempre se lleva algo y esto es lo que ocurre en el Museo del Carnaval de Uruguay. En mí caso, dijo Fernández, me alegró, veo la diversión ahí dentro. (2) Mensaje Local, tiene que ver con el país, pero también con la comunidad. En el ejemplo del Carnaval, a partir de este Museo, a Fernández le significó un cambio de punto de vista que no lo olvidará más. (3) Mensaje Específico, es lo que se busca dar como institución a la ciudadanía. Ejemplo valores sobre lo natural, educar a la ciudadanía.

El trabajo en cultura tiene que estar dirigido a varias generaciones (por lo menos dos hacia atrás, para evitar convertirse en algo político partidario). Por eso  hay que convencer al padre, al hijo y si se puede al abuelo también. El patrimonio debería ser  política de Estado, pero no hay que aplicar  la visión del conquistador “arrasar con todo lo anterior y comenzar de nuevo”. Como se sabe, no  conduce a nada.

L/D

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